sábado, 30 de enero de 2010

El Ahora

El pensamiento tiene su importancia. El pensamiento es una herramienta como lo es un brazo ó una pierna. No usas las piernas todo el tiempo. La usas cuando es necesario. La mente es una herramienta poderosa. Hace posibles muchas cosas pero es tan poderosa que a veces toma control nuestro.
La mente debería ser usada sólo cuando es necesaria y lo es el 10% del tiempo. Las investigaciones muestran que alrededor del 90% de nuestros pensamientos son repetitivos. La mayor parte son preocupaciones sobre el futuro o volver a vivir el pasado. Esto es claramente innecesario. El único momento real es el Ahora. Escapar el Ahora es la causa de tanta tensión, “fracaso” y problemas en nuestro mundo.
Tu estado normal a través del día debería ser de no mente. Deberías ser un observador, no un pensador. Deberías vigilar tu mente. Tal como observas las cosas fuera de ti, comienza a observar también tus pensamientos. De esta manera, dejas de estar bajo el control de la mente. Dejas de identificarte con la mente y te identificas con tu Ser, el Ser que todo lo sabe. Comienzas a vivir en el presente en lugar del pasado ó en lugar del futuro imaginario. Tus tensiones desaparecen y tu éxito florece. 
Sin embargo, no juzgues tu mente ni la maldigas si te das cuenta que has estado bajo su control. Es una herramienta maravillosa si aprendemos como usarla correctamente. Tú ya sabes como usarla. Usala sólo para formular tus intenciones, para darle a la vida las imágenes apropiadas para traer nuevas experiencias a tu momento de Ahora (no dentro de cinco minutos, sino Ahora, en este instante).
Comenzarás a darte cuenta que en el momento del Ahora no tienes ningún problema, tienes eventos, pero no problemas. Los problemas existen en la mente, en tus pensamientos. Cómo eventos, son sólo eventos que suceden y cambian tan pronto como suceden. Todos tus problemas, si es que hay alguno, son imaginarios y están en el “futuro”. 

lunes, 25 de enero de 2010

Nuestros pensamientos...




Los resultados del presente son efecto de pensamientos anteriores. En otras palabras, cuando miras al mundo de hoy, en realidad estás mirándote a ti mismo tal como eras ayer. El mundo de este momento presente refleja tus pensamientos y estado del ser antes del presente momento del ahora. Es todo una ilusión.
La locura es hacer lo mismo repetidamente y esperar resultados diferentes. ¿Qué estás haciendo? ¿Estás haciendo lo mismo todos los días y esperas un resultado diferente? ...

Existe una cosa llamada pensamiento auspiciante. Es el pensamiento detrás del pensamiento. El pensamiento auspiciante tiene más fuerza creativa que el pensamiento auspiciado. Lo que normalmente llamamos pensamiento, es en realidad el pensamiento auspiciado. Si pensamos que necesitamos ingerir comida, ese pensamiento tiene una causa detrás. Ese es el pensamiento auspiciante, en este caso, es la creencia de que tenemos hambre. Proviene de la mente subconsciente ó lo que la gente llama el corazón. El pensamiento auspiciante es la forma de pensar en la que tú realmente crees y sostienes como verdad. Es tu programación subconsciente. 
Si tu pensamiento auspiciado y tu pensamiento auspiciante acerca de algo no están coordinados, si no están de acuerdo, el pensamiento auspiciante gana. 
Por esa razón es que la gente que reza implorando a Dios nunca consigue que sus plegarias sean “respondidas”,  porque sus pensamientos auspiciantes son de “no tener” ó de “carecer”.   
De un libro de David Cameron Gikandi.