lunes, 25 de enero de 2010

Nuestros pensamientos...




Los resultados del presente son efecto de pensamientos anteriores. En otras palabras, cuando miras al mundo de hoy, en realidad estás mirándote a ti mismo tal como eras ayer. El mundo de este momento presente refleja tus pensamientos y estado del ser antes del presente momento del ahora. Es todo una ilusión.
La locura es hacer lo mismo repetidamente y esperar resultados diferentes. ¿Qué estás haciendo? ¿Estás haciendo lo mismo todos los días y esperas un resultado diferente? ...

Existe una cosa llamada pensamiento auspiciante. Es el pensamiento detrás del pensamiento. El pensamiento auspiciante tiene más fuerza creativa que el pensamiento auspiciado. Lo que normalmente llamamos pensamiento, es en realidad el pensamiento auspiciado. Si pensamos que necesitamos ingerir comida, ese pensamiento tiene una causa detrás. Ese es el pensamiento auspiciante, en este caso, es la creencia de que tenemos hambre. Proviene de la mente subconsciente ó lo que la gente llama el corazón. El pensamiento auspiciante es la forma de pensar en la que tú realmente crees y sostienes como verdad. Es tu programación subconsciente. 
Si tu pensamiento auspiciado y tu pensamiento auspiciante acerca de algo no están coordinados, si no están de acuerdo, el pensamiento auspiciante gana. 
Por esa razón es que la gente que reza implorando a Dios nunca consigue que sus plegarias sean “respondidas”,  porque sus pensamientos auspiciantes son de “no tener” ó de “carecer”.   
De un libro de David Cameron Gikandi.

1 comentario:

  1. Recapacitar sobre el movimiento unificado de la existencia,sujetos de hilo dorado tejido con el amor total que inunda la ,agnifica expresión de la totalidad."Cuan bello eres, que menesteres nos entregaras para desnudar los entresijos ocultos de nuestra dualidad, hasta donde la entrega consciente nos permita, mi queridisimo" A ti entrego el verdadero tesoro, porque este te pertenece y humildemente rezo para ser un buen siervo a TU verdad. Que sea la gloria en la tierra, como lo es en los cielos para tofos tus hijos y que tu voluntad sea recibida con alas de amor y paz, en nuestros corazones. GRACIAS

    ResponderEliminar

Si te interesa, puedes escribir un comentario...