miércoles, 30 de marzo de 2011

4 LEYES UNIVERSALES (a tener muy en cuenta)


¡Si el ego no existiese, no habría conciencia de la experiencia manifiesta!
El ego es tu grabadora. Es el observador de tus pensamientos, carencias, necesidades y deseos. Lleva a estos pensamientos a una especie de formato de enfoque robotizado, y esto les permite manifestarse en circunstancias y situaciones que crean tu experiencia. El ego, literalmente filtra tus pensamientos, sentimientos y deseos, y hace que se fusionen en la experiencia manifiesta. Es un proceso no una entidad. Un proceso sobre el cual tienes control total, si te puedes hacer cargo de tus pensamientos, sentimientos y deseos, y dirigirlos activamente hacia lo que quieres experimentar. Estos pensamientos tienen que ser relativamente representativos.
Por ejemplo, si simplemente te enfocas en el cambio, espera el caos en tu vida porque éste es el cambio que creas hasta que decides tener una idea más precisa de lo que quieres en tu experiencia. El proceso por el cual esto funciona involucra una ley universal llamada de Atracción.
Una vez que se ha generado una idea con el entendimiento positivo de que es posible, el ego mantiene la imagen y completa el proceso a través de la polaridad energética positiva/negativa.

Gracias a la acción de la ley de Atracción, y a la naturaleza maleable del potencial de una idea irrumpiendo realmente en vuestra experiencia, ésta se realiza. En estos momentos la manifestación instantánea de ideas en este planeta es muy difícil, el ego incorpora el proceso dentro de vuestra idea secundaria de tiempo. Si sois incapaces de manteneros enfocados en desear una cierta experiencia, a menudo os negáis a vosotros mismos la experiencia deseada. Hay un comentario en vuestra biblia con respecto a “la oración equivocada”. Ya que lo que referís como dios es creativo por naturaleza, siempre que enfocáis vuestro deseo de experimentar algo de una manera sincera, estáis en “constante oración” porque estáis dentro de esa expresión creativa y expansiva que se origina en la fuente de vuestra existencia.

¿Pero qué pasa cuando estáis pidiendo algo que puede causar problemas a otra persona? ¡Pues que la ley funciona igualmente! Pero, hay un efecto para aquello que causáis. Como acabamos de decir, estáis utilizando la ley universal de Atracción, y su proceso implica energía “igual” atrayendo más energía “igual”. Si causáis un problema a otra persona con el uso deliberado de esta ley, aquello que habéis creado para otro lo experimentaréis también vosotros. Son como las dos caras de una misma moneda. Una se le presenta a la otra persona y la otra se os presenta a vosotros. Si en verdad estáis intentando seriamente comprender esta ley, entonces si os atrevéis, observad los eventos que ya habéis experimentado y veréis que éste ha sido el caso muchas veces. Cuando habéis deseado una bendición a alguien, también vosotros la habéis recibido, quizás no exactamente de la misma manera, pero sí con algo significativo para vosotros en vuestra vida. Considerad también las dificultades.
Creo que hay una referencia en la biblia que reza “pon un vigilante en tu boca, ya que las palabras (incluyendo los pensamientos) que salen, no te son devueltas vacías”.

Al utilizar esta comprensión, debéis mantener firmemente el deseo en vuestra conciencia. Si erráis en el deseo, queriendo crear un problema en la vida de otra persona, al principio del proceso todavía estáis a tiempo de recapacitar y retirar el enfoque de dicha intención. Entonces no se le manifestará para que lo experimente. Las emociones y los sentimientos intensos pueden aumentar el potencial de la manifestación y acelerar el proceso, tanto si es para vuestro “bien” como para el de otra persona. Lo opuesto también es verdad.

Entonces resumiendo, primero debe existir algo, para que la energía pueda ser atraída hacia ello.
“Al principio había el “pensamiento”, y el “pensamiento” se hizo carne (se manifestó)”.
Siguiendo al pensamiento conceptual, debe existir el deseo para que se manifieste. Solamente pensar el pensamiento no basta para hacer que surja. Debe existir un deseo emocional que aporte el combustible para el movimiento, o cambio de energía, del pensamiento en expresión. A través de la coagulación de las energías “atraídas” se inicia la manifestación. La forma incluye más cosas; incluye situaciones, circunstancias y una estimulación del deseo de pensamientos adicionales que apoyen la finalización de la experiencia deseada. Una vez iniciado el proceso, es con el impulso creativo de moverse hacia la finalización, que el propósito se armoniza con las leyes universales.

El enfoque deseado debe proporcionar libertad, dentro del viaje en espiral de regreso a la fuente, para todo lo que afectará. Cuando éste es el propósito subyacente, entonces lo armónico de la Atracción es puesto en movimiento con todo su sutil poder liberado.

La ley subyacente a la creación es la ley de la Atracción. Planteada sencillamente dice: “los iguales se atraen”.
Sucede así mediante el instrumento básico de la creación: el pensamiento. vuestra biblia dice: “Como un hombre piensa, así es él”.
Si te enfocas en el lodazal de lo malvado, una vez eres consciente del mismo, lo reforzarás. Es importante estar consciente de esto para que podáis retirarle vuestro refuerzo utilizando la segunda ley, la ley de la Creación.

La segunda ley, la ley de la Creación, se denomina ley de la Intención deliberada o determinada.
El uso adecuado de esta ley se resume así: “el pensamiento mantenido con intención determinada permite la manifestación”.
El pensamiento intencionado, visualizando su conclusión-terminación, y estimulado vibracionalmente mediante la emoción, mantenido firmemente en sitio con el compromiso, aporta la manifestación.
Cuando elegís colocar vuestra intención más allá de la obra percibida por los cinco sentidos, y aplicarla a la creación de una nueva experiencia, estáis retirando vuestro consentimiento y apoyo a la experiencia en la que no deseáis seguir participando. Entonces estáis utilizando la segunda ley del universo.

El ingrediente del libre albedrío en la “sopa” de la experiencia, nos enseña otra ley universal, la de la Benevolencia. La responsabilidad personal es justamente eso, PERSONAL. Significa que “a cada conciencia individual le corresponde la elección de su propia experiencia, y no es  responsable de la experiencia de los demás”. La benevolencia  o ley de tolerancia,  es la ley más difícil de aprender a nivel tridimensional, a causa de la necesidad profundamente arraigada de controlar. El control queda trascendido mediante la práctica de esta ley.

La cuarta ley universal es la de Equilibrio. Un patrón de pensamiento que influye poderosamente en el equilibrio o desequilibrio de la expresión personal es el de pasado, presente y futuro. Dado que todos son necesarios por diversas razones de supervivencia y progreso, están incrustados dentro del modo observador del ego.
Recordáis que os quemasteis un dedo, y por eso no volvéis a tocar la estufa. Deseáis construir una casa más grande para vuestra familia, por tanto imagináis los pasos a dar en vuestro futuro para atraer esa experiencia, y así os desplazáis entre las dos.
Sin embargo, existe el momento presente del “ahora” que vosotros experimentáis, que no es ni el pasado ni el futuro. Éste es vuestro punto de equilibrio. Es vuestro lugar de descanso. Regresáis ahí durante vuestro ciclo de sueño.
Hubo un tiempo, cuando el planeta giraba en el ciclo de luz y oscuridad, y todos estaban activos o descansaban al unísono, que trajo gran equilibrio a la totalidad. Con la llegada de la luz artificial, este modelo de equilibrio dejó de estar presente. La humanidad está ahora en actividad constante, primero con la “era industrial”. Ahora con la “era tecnológica”, incluso dentro de los hogares, las horas de descanso en una familia han cambiado. En lo que vosotros denomináis Lejano Oriente se practica una técnica muy antigua de equilibrio que se llama meditación. El grupo de la nueva era la adoptó rápidamente. A menudo las técnicas están distorsionadas, y la conciencia consciente está sobrecargada por el revoltijo de los medios informativos y es incapaz de localizar el punto inmóvil de equilibrio dentro de la combinación de consciente y subconsciente.
Entrar en este punto inmóvil permite la conexión con el alma, y se puede lograr el equilibrio, como mínimo,  por un breve espacio de tiempo. El equilibrio se logra mediante la comprensión y práctica de las tres leyes básicas del universo: Atracción, Creación Deliberada o Intencionalidad  y Benevolencia o Tolerancia.

La experiencia que ocurre en lo que llamáis el momento presente es un término equivocado, una denominación inaplicable. Cuando estáis enfocados en lo que estáis pensando o haciendo, sin atender ninguna otra actividad “perdéis la noción del tiempo”. Todos vosotros habéis experimentado esto. Sólo mirando vuestro instrumento para rastrear el tiempo (llamado reloj) podéis tener idea de la hora que es, aparte de la presencia o ausencia de luz solar. Si cada uno de vosotros estuviera totalmente entregado a lo que estuvierais haciendo, y ése fuese el único enfoque que necesitaseis, y no existieran estaciones que os preocupasen, ¿os importaría mucho saber qué día o qué hora era? Lo dudo.
Si estuvieseis equilibrados, ¿sería necesario el sueño? ¿Y la comida? ¿Y los pasatiempos recreativos?
Todas estas necesidades ¿no son  realmente tan sólo una búsqueda de equilibrio?

Esto no es para sugerir que os convirtáis en “respiradorianos”. Simplemente son ideas para intrigar a vuestra imaginación.
Vuestras experiencias están por ahora tan lejos del equilibrio previsto, que os resulta difícil imaginar a qué se parece el equilibrio real durante la experiencia de vigilia en el formato tridimensional. Es mucho más placentero de lo que vosotros conocéis.
No es extraño que deseéis abandonar esta dimensión, pensando que el descanso es algo que se encuentra en cualquier otro lugar.
Sin el equilibrio en la experiencia tridimensional, no podríais existir en dimensiones más elevadas, en vuestro formato corporal y actual autoconciencia. Primero debéis equilibraros. Debido a que estáis todos interconectados, los individuos tienen problemas insuperables para conservar el equilibrio, incluso si lo alcanzan.
Extractado del "Manual para el nuevo Paradigma" de George Green

La actitud de "Victimas"


Empieza un nuevo día mientras vuestro planeta gira sobre su eje y la humanidad duerme bajo la influencia de las fuerzas de la oscuridad. Sus planes parecen moverse en un inexplicable enfoque hacia el desastre, y sólo aquellos pocos leales parecen estar despiertos y percibiendo el movimiento de fatalidad que se cierne sobre este encantador mundo verde y azul. La magia de la belleza se vuelve borrosa, y el único hogar del que dependéis se apaga a vuestro alrededor, y aunque se notara, es ignorado. Los días finales descienden al abismo mientras vuestra televisión, deportes y pócimas del sueño os drogan figurada y literalmente.

¿Qué podéis hacer unos pocos para detener la marea de oscuridad que desciende más y más rápidamente? ¿Deberemos relataros lo que ya sabéis, gemir y golpearnos el pecho como hicieron los profetas de la antigüedad, y pedir a gritos que “dios” nos salve?

Millones ya han estado haciendo esto a un creador que ellos creen que ignora sus gritos suplicando respuesta a sus plegarias. Ellos piden desde la perspectiva de víctimas que desean ser rescatadas, y no se puede recibir respuesta a tales plegarias.
Sólo aquellas plegarias que piden poder, dentro del marco de la creación, pueden ser contestadas. ¿Acaso creéis que las estrellas cuelgan en vuestros cielos por la fortuita petición de un ser divino?
¡Claro que no!
Están ahí dentro del diseño de equilibrio y de las leyes matemáticas que sostienen “Todo lo que Es”.

El hombre sigue suplicando mecánicamente, y bloquea la verdadera ayuda que desea, porque no está dispuesto a participar, excepto en maneras que son contrarias a las leyes verdaderas que sostienen su infeliz existencia. La historia de estas leyes nos rodea en todo lo que queda de la naturaleza, pero en su sufrimiento, cierra los ojos. 

Los que estudiaron ciencia analizan los componentes, pero no el proceso de la Vida, dentro de las estructuras manifiestas de la Vida que les rodea. El análisis mental de la mente les engaña con la arrogante creencia de su superioridad sobre el entorno, en vez de su hermandad y vínculos con él.
¿Cómo pueden ser ayudados los que están cada vez más y más ciegos al verdadero proceso en el que existen?
La víctima no puede ser rescatada,  sino que debe levantarse tirando hacia arriba del cordón de sus zapatos, y rescatarse a sí misma siendo responsable de su propio rescate. El hombre está hecho de la esencia de su fuente. Es un diminuto holograma de su fuente. Un holograma es un pequeño fragmento de una totalidad, que tiene el potencial de proyectar la totalidad de la cual procede. Aunque el concepto de holograma ha sido comprendido en parte, no ha sido “analizado” aplicándolo a la esencia de la Vida que está en el interior de todos los seres autoconscientes. Enfocar de nuevo este fragmento hacia su fuente de existencia es lo que determina el grado de la totalidad de la fuente, que se manifiesta en la realidad conocida de cada fragmento de experiencia. Si consideráis el grado de enfoque que ha traído a manifestación al planeta tierra desde el fragmento de su fuente, podéis  empezar a entender la situación. Observad la magnificencia del cuerpo humano que sirve de vehículo a vuestra experiencia aquí. Un vehículo capaz de albergar una auto-consciencia que puede contemplar su fuente sólo con quererlo, porque esa fuente se contempla a sí misma y, haciéndolo así, se fragmenta a sí misma a fin de que pueda contemplarse a sí misma aún más, a través de la experiencia manifestada. Es el libre albedrío que hace esto, en ello. Dado que el libre albedrío es el vehículo de su contemplación, se manifiesta en cada fragmento holográfico. Este libre albedrío permite toda experiencia dentro de un mayor aumento de su proceso de auto contemplación.
Es la polaridad la que capacita el reconocimiento de aquello que sirve al proceso de contemplación, y de aquello que no sirve, de manera que el equilibrio de ambos permite la realización de cada exploración en el retorno del fragmento,  que originalmente se proyectó de la fuente. Para seguir este proceso como está presentado, hay una espiral de comprensión cuando es contemplado por la mente que lee esta información. Cada fragmento se restituye a sí mismo a la fuente que lo proyectó. De esta manera sois dirigidos a comprender el marco del proceso en el que estáis inmersos, porque cada uno de vosotros sois un fragmento holográfico de la fuente de Todo lo que Es, en el proceso de auto-contemplación.
¡Qué espanto!, ¿os convertiréis en nada si seguís el camino de retorno? ¡Claro que no!
Con cada fase que regresa a la fuente de vuestra entrada en la experiencia, crece vuestro propio auto-conocimiento, y se hace más y más grande hasta que tenéis el potencial absoluto de ser un igual completo dentro de la totalidad mayor de la fuente que se contempla a sí misma.
¿Colapsa esto vuestras mentes finitas? No debería.
Debería ser la noticia más reconfortante que nunca habéis englobado.
¿Podría haberse descrito un cuadro más brillante de vuestro futuro?
¿Qué posibles placeres podrían nunca equipararse con un futuro como éste?
Dejad que os asegure que no existen placeres efímeros del cuerpo encarnado que puedan compararse con los que os esperan, cuando la auto-consciencia empieza a ascender la espiral de experiencia hacia el objetivo final.
Extractado de "Manual para el nuevo Paradigma de George Green

EL "SER" Y LA "FUENTE"


Si la humanidad, hombres y mujeres, han de trascender este juego, aparentemente interminable, de perseguirse la cola durante generaciones de sufrimiento, deben dejar de crear víctimas y de ser víctimas. Deben captar y comprender que su propósito es la veneración, educación y desarrollo de la conciencia de su conexión con su fuente, el diminuto chip de computadora, ¡el propio segmento de creación que es su conciencia del yo!
La conciencia YO SOY lo que YO SOY, que es lo que y quién todos y cada uno de los seres humanos es, ya sea hombre o mujer, negro, blanco, rojo, amarillo o moreno, terrestre o alienígena.
Esta conciencia llega a la condición de “ser”, y a través de la experiencia recurrente aprende rápida o lentamente lo que le es enseñado, pero no cómo regresar desde donde vino a realizarlo.
Está totalmente influido por la paternidad que recibe a lo largo de sus numerosas experiencias, no sólo de los demás, sino lo más importante de todo, de sí mismo. A través de actitudes y decisiones, acepta o rechaza sus oportunidades de armonizarse con su fuente, y de extender esta energía expansiva en sus elecciones de experiencia.
No es un proceso simplista, por tanto para entenderlo se otorgan ciclos de experiencia durante largos períodos.
Es un imperativo captar la comprensión de que cada uno es una extensión individual de la totalidad, parecido a una célula en un cuerpo, en el que todo son individualidades, pero forman parte de una totalidad enfocada dentro de una mayor totalidad. Al igual que en el cuerpo humano, si las células atacan y destruyen los órganos esenciales, el cuerpo no puede sobrevivir.
La humanidad debe comprender que no puede seguir destruyéndose a sí misma sin destruir la totalidad que contiene.
Debe cesar la destrucción del planeta que le acoge, así como a todos los demás.
Repetir los mismos patrones destructivos, sin trascenderlos, causa que el planeta de apoyo, el sistema solar y la galaxia estén in-dispuestos, desequilibrados y desarmónicos.
El centro creador de esta galaxia tiene la elección de ayudar a que esto ocurra para todos aquellos que quieren aceptar esta ayuda, y colocar a todos aquellos que decididamente la rechazan en un espacio de contención para que los cooperadores dejen de ser reprimidos por los no cooperadores.
Es tan simple como esto, y la humanidad está ahora enfrentando esta elección.

Los maestros no serán puestos en una posición que les convierta de nuevo en víctimas martirizadas para los propósitos de quienes son adictos al control y explotación de sus semejantes. Esto será un movimiento de las bases, y se extenderá entre la gente dispuesta que capte la comprensión de quién y qué son, y cambien su conciencia en consonancia. Estos extenderán luego la comprensión entre ellos mismos y se convertirán en sus propios maestros. Los mensajes serán cortos y simples, y cada uno los aplicará o no a su propia manera. Cada uno asumirá la responsabilidad y divulgará la enseñanza a todos los que estén decididos a aceptarla, y permitirán a aquellos que elijan otra cosa, que sigan su propio camino.
El tiempo de la auto conciencia y responsabilidad personal, que permitirá trascender esta situación desesperada hacia un nuevo paradigma de experiencia, es ahora, o el sitio de contención está preparado y esperando.
Es oportunidad o amenaza, según determine vuestra actitud.
Extractado del " Manual para el nuevo Paradigma" de George Green

miércoles, 23 de marzo de 2011

"UN MENSAJE A GARCÍA"


Hay un hombre en toda la historia de la guerra entre España y los Estados Unidos que sobresale en el horizonte de mi memoria como el planeta Marte en su perihelio.
Al declararse la guerra, cuando Cuba era aún colonia española, era muy necesario comunicarse prontamente con el jefe de los insurgentes que luchaban por la independencia, un tal García. Este se hallaba entonces en la selva de Cuba, sin que nadie supiera de su paradero. Era imposible toda comunicación con él, telegráfica o por correo. El presidente de los Estados Unidos tenía que contar con su cooperación sin pérdida de tiempo. ¿Qué hacer?

Alguien le dijo al presidente: «Hay un hombre llamado Rowan que puede encontrar a García». Rowan tomó la carta, la selló en una cartera de hule, se la amarró al pecho, hizo un viaje de cuatro días y desembarcó de noche en las costas de Cuba en un bote sin cubierta. De cómo fue que se internó en las montañas, y en tres semanas salió al otro lado de la isla, tras haber atravesado a pie un país hostil, y entregado la carta a García, son cosas que no tengo deseo especial de narrar en detalle. Pero sí quiero resaltar que el Presidente McKinley, de los Estados Unidos, puso una carta en manos de Rowan para que éste la entregara a García. Rowan tomó la carta y nunca preguntó «¿Dónde está García?».
He aquí un hombre cuya figura debe ser fundida en imperecedero bronce y puesta su estatua en todos los colegios del país. No solo es la enseñanza de libros lo que los jóvenes necesitan, ni la instrucción de esto o aquello, sino el fortalecimiento del carácter para que actúen con diligencia y cumplan con su deber: «Llevar el mensaje a García».

El general García ya no existe, pero hay otros García. No hay quien haya tratado de administrar una empresa sin que a veces haya quedado atónito al notar la resistencia del promedio de los hombres, la inhabilidad o la falta de voluntad de concentrar sus inteligencias en una cosa dada y hacerla.
La asistencia irregular, la falta de atención, la indiferencia y el trabajo mal hecho parecen ser la regla general. No hay hombre alguno que salga airoso de una empresa a menos que, quiera o no, por la fuerza induzca, obligue o soborne a otros a que le ayuden. La excepción es cuando Dios todopoderoso, en su bondad, hace un milagro y le envía un ángel de la luz para que le sirva de auxiliar.
Usted puede hacer esta prueba. Supóngase que en estos momentos está sentado en su oficina. A su alrededor tiene varios empleados. Pídale a uno de ellos: «Tenga la bondad de buscar en la Enciclopedia y hágame un memorándum corto de la vida de Corregio». ¿Cree que el empleado contestaría «Sí Señor», y se marcharía a hacer lo que le pidió? Nada de eso. Lo mirará de soslayo y le hará una o más de las siguientes preguntas:

¿Quién era Corregio?
¿En cuál enciclopedia?
¿Dónde está la enciclopedia?
¿Acaso fui empleado para hacer eso?
¿No querrá decir usted Bismark?
¿Por qué no lo hace Carlos?
¿Murió?
¿Hay prisa para eso?
¿No sería mejor que le trajera el libro y usted mismo lo buscara?
¿Para qué quiere usted saberlo?

Y me atrevería a apostar diez contra uno que, después que haya contestado el interrogatorio y explicado la manera de buscar la información que necesita, y por qué la necesita, su empleado se retira y obliga a otro compañero que le ayude a encontrar a García, regresando poco después diciendo que no existe tal hombre. Desde luego puede darse el caso de que yo pierda la apuesta, pero según la ley de promedios es casi imposible.

Esa incapacidad para obrar independientemente, esa nebulosa moral, esa carencia de la voluntad, esa falta de disposición para hacerse cargo de una cosa y realizarla, eso es lo que hace imposible el socialismo en la práctica.
Si los hombres no actúan por su propia iniciativa para sí mismo, ¿qué harán cuando el producto de sus esfuerzos deba ser para todos? La fuerza parece necesaria y el temor a ser despedido el sábado, a la hora del cobro, hace que muchos trabajadores o empleados conserven su trabajo.
Alguien anuncia buscando un taquígrafo; y de diez solicitantes que acuden, nueve son individuos que no tienen ortografía, y lo que es más, individuos que no creen que es necesaria tenerla.
¿Podrían esas personas escribir una carta a García?

Hace poco oímos manifestaciones de simpatía hacia «los emigrantes explotados en los talleres», y junto a esas expresiones con frecuencia se oyen otras palabras hacia los hombres que están en el poder. Pero se calla el nombre del empresario que envejece antes de tiempo tratando en vano de inducir a los eternos disgustados y perezosos a que hagan un trabajo a conciencia; ni se dice nada del tiempo ni de la paciencia con que ese patrón ha venido buscando personal que haga otra cosa más que «matar el tiempo» tan pronto como el patrono vuelve la espalda. En todo establecimiento y en toda fábrica se tiene constantemente en práctica el procedimiento de selección por eliminación. El patrón se ve constantemente obligado a despedir personal incompetente. Este procedimiento de selección sigue en todo tiempo y la única diferencia es que cuando la situación está mal y el trabajo escasea, se hace la selección con más escrupulosidad, prescindiendo del incompetente y del inservible. Por interés propio, el patrono se queda con los mejores empleados, con los que pueden llevar un «Mensaje a García».

Conozco a un individuo de aptitudes verdaderamente brillantes, sin embargo, es completamente inútil para cualquier negocio debido a la malsana sospecha que constantemente abriga de que su patrono lo oprime o trata de oprimirle. Sin poder mandar, no tolera que se le mande. Si se le diera un mensaje para que lo llevara a García, probablemente su contestación sería: «llévelo usted mismo».
Hoy ese hombre anda errante por las calles en busca de trabajo bajo el peso de la duda. Quienes le conocen rehúsan darle trabajo porque es la esencia misma del descontento. No entra en razón y lo único que en él podría producir algún efecto sería un buen puntapié de una bota de suela gruesa. En verdad, un individuo como ése no es menos digno de compasión que el inválido; pero en nuestra compasión derramemos también una lágrima por AQUELLOS HOMBRES QUE SE ENCUENTRAN AL FRENTE DE GRANDES EMPRESAS, CUYAS HORAS DE TRABAJO NO ESTAN LIMITADAS POR EL SONIDO DEL TIMBRE Y CUYOS CABELLOS ENCANECEN PREMATURAMENTE EN LA LUCHA QUE SOSTIENEN CONTRA LA INDIFERENCIA, CONTRA LA INGRATITUD DE LOS OTROS, QUIENES, A NO SER POR EL ESPIRITU EMPRENDEDOR DE ESTOS, ANDARIAN HAMBRIENTOS Y SIN HOGAR.

Diríase que me he expresado con mucha dureza. Tal vez sí; pero cuando el mundo entero se ha entregado al descanso, yo quiero expresar una palabra de simpatía hacia el hombre que sale adelante en su empresa, quien aún a pesar de grandes inconvenientes, ha sabido dirigir los esfuerzos de otros hombres.
También yo he cargado mi vianda al taller y he trabajado a jornal diario, y también he sido patrón y sé qué decir de ambos lados. No hay excelencia en la pobreza, los harapos no sirven de recomendación; no todos los patrones son rapaces y tiranos; y no todos los pobres son virtuosos.
Vayan mis simpatías hacia el hombre que trabaja, esté o no presente el patrón. Y al hombre que al entregársele una carta para García no hace preguntas tontas, ni tiene intención de arrojarla a la primera alcantarilla.
Ese nunca queda sin trabajo ni tiene que declararse en huelga. La civilización busca ansiosa, insistentemente, a esa clase de hombres. Cualquier cosa que se le pida la consigue. Se le necesita en toda la ciudad.
«Es cierto que los burócratas ya no son servidores públicos de la ciudadanía sino sus dueños y tiranos, irresponsables y arbitrarios. Pero ello no es culpa de la burocracia. Es el resultado del nuevo sistema de gobierno que restringe la libertad de las personas para manejar sus propios asuntos y que asigna cada vez más funciones al gobierno. El culpable no es el burócrata sino el sistema político.»

N. D. Este artículo apareció publicado por primera vez el 22 de febrero de 1899, en la revista Philistine. La historia del mensaje a García es de la vida real y ha sido relatada muchas veces. 

martes, 15 de marzo de 2011

La psiquis colectiva


En la religión y la política, las creencias de la gente y sus convicciones son en casi todos los casos de segunda mano y son recibidas, sin ser criticadas, desde autoridades que tampoco han examinado las cuestiones referenciadas, sino que las han tomado prefabricadas de otros que también las recibieron en su momento y cuyas opiniones muchas veces no valen la pena.

Todas las formas de perversión que la lengua tiene, es un reflejo en el microcosmos de la psique individual. "Y el problema que veo en la humanidad hoy, es que no creemos en nosotros mismos”.  Tenemos un trabajo de 9:00 a 17:00, una casa, hijos, las cuentas, televisión, hobbys y las diligencias que hacemos cada día.  Eventualmente empezamos a creer que esto es lo que realmente somos. 
Pero quiénes hay realmente debajo de nuestros cargos, debajo del estatus de "madre o padre", más allá de ser "teísta o ateo", "republicano o demócrata", “negro o  blanco", "hombre o mujer".  ¿Qué o quiénes somos nosotros?

No sabemos, porque cada vez que oímos algo que no queremos oír sobre nosotros mismos, lo rechazamos. Lo tratamos de ignorar y lo proyectamos hacia alguien más, para juzgarlo.

Esto es lo que se llama "Represión". Y ya hemos visto lo que la represión puede llegar a hacernos en el nivel individual, pero, ¿Qué hay del nivel colectivo, el de la humanidad?  ¿Qué sucede cuando todo el mundo se niega a ver lo que realmente es?

LA PSIQUE

Carl Jung descubrió que hay una "mente colectiva" que conecta a todos los humanos. Esto quiere decir que toda la humanidad comparte una parte de su mente con los demás.
Esto se hace evidente en todo el mundo a través de las mitologías y símbolos comunes o con el estudio de los campos semánticos. 
Esta colectividad es un ejemplo macro de la mente inconsciente del cuerpo humano en el cual millones de millones de células comparten una señal en común. El parásito, llamado "el Falso Ser" o el "Ego". Este requiere un flujo continuo de energía psíquica para sobrevivir. Los alimentos, los combustibles y cualquier otra forma de sostenimiento, es energía. La consciencia humana es un campo electromagnético de energía.
Cuando el potencial de energía es utilizado, es transformado en energía cinética.  La cual es usada para perpetuar el falso ser. Este escenario ocurre incluso con los más pequeños organismos parasitarios y hasta con  los organismos pluricelulares o colectivos como es la “Humanidad".

Un parásito crea sustancias químicas que causan que el anfitrión necesite las sustancias que el parásito necesita para sobrevivir. Mientras el anfitrión no lo sepa, seguirá alimentando al parásito, sin alimentarse bien. De una manera similar, Wilhelm Reich declaró que sociedades enteras sufren psicosis causadas por el hecho de no alimentar nuestros impulsos "Orgánico-Biológicos". El dice por ejemplo que: “La represión sexual apoyada desde el poder de la iglesia se ha internado muy profundamente en las masas explotadas las cuales producen una ansiedad sexual y experimentan culpa. Esto crea timidez hacia la autoridad y ata los hijos a sus padres. Esto crea en ellos un servilismo y una sumisión a la autoridad estatal y a la explotación capitalista. Esto paraliza las capacidades intelectuales y críticas de las oprimidas masas porque consume gran parte de su energía biológica. Y, finalmente paraliza el desarrollo integral de las fuerzas creativas haciendo imposible el objetivo de todas las aspiraciones de libertad humana. De esta manera, el prevaleciente sistema económico (en el cual pocos individuos pueden fácilmente gobernar sobre las masas) se internaliza en la psique de los mismos oprimidos”.

Lo que Reich intentó demostrar en su fuerte declaración es que en un nivel colectivo, la supresión de una función natural, sea biológica, espiritual o emocional, se reproduce en una reacción que podríamos llamar "Enfermedad Psíquica".
Esta enfermedad o patología se refleja en las masas a través del inconsciente colectivo y actúa como una epidemia. La humanidad padece su propia incapacidad de buscar su verdadera libertad. Esto significa que los individuos y las masas no tienen la habilidad para gobernarse a sí mismo en el mundo psíquico.
Entonces esto se manifiesta en el macrocosmos por medio del gobierno y los poderes religiosos organizados. Entonces cedemos nuestra soberanía, nuestra soberanía nacional e individual a "cualquier persona" y "cualquier cosa". Bienvenidos a las infames leyes del mundo terrestre, los patriarcas de la civilización, las dictaduras sociales, económicas, políticas y espirituales:  la tiranía psíquica.

Esta simple enfermedad de nuestra psique, esta falta de responsabilidad y negligencia con nuestras libertades más básicas han despejado el camino para cada "Tirano" que haya gobernado en la faz de este planeta.
La humanidad queda atrapada en un ciclo de miedo, apatía y odio.
Estos instintos humanos se manifiestan en sistemas políticos y burocracias que, muy a menudo, limita los derechos humanos más básicos como la búsqueda de la felicidad.

Una sociedad que tiene como fundaciones el miedo, la apatía y el odio se organiza en un sistema que fundamentalmente afecta la felicidad de todos los individuos.
Esta sociedad reprime el desarrollo individual y mantiene un patrón cíclico de comportamiento de superioridad e inferioridad y una sociedad clasista fundada en ideales engañosos.
Pero, aunque esos tiranos opresores sean satanizados por las masas, ellos no son demasiado diferentes de nosotros. De hecho, ellos y nosotros formamos una unidad.
En el libro "The Prophet" de Kahlil Gibran, él poéticamente declara: "Digo que, mientras lo sagrado y lo bondadoso no se levanten más allá de lo más alto que haya dentro de cada uno, entonces,  lo malvado y lo débil no podrán bajar más que lo más bajo que hay en cada uno de nosotros también. Cada uno de nosotros tiene la capacidad de cometer el pecado más horrendo o mostrar la compasión más hermosa por cada uno de nuestros compañeros humanos”.

Esta es la definición de una enfermedad dentro de la psique y el alma del hombre. Porque no luchamos contra carne y huesos sino en contra de principados, contra poderes, contra los reyes del mal de este mundo, contra la maldad espiritual de lugares muy altos.
Piensa en cualquier posición de poder que crees está por encima de ti. La realeza, los líderes de los gobierno, las naciones unidas, las organizaciones bancarias, los monopolios corporativos y los monstruos mediáticos, todos ellos son facetas de nuestro falso ego.
Ellos son una reflexión física de nuestra propia enfermedad. Ellos necesitan nuestra participación consciente, nuestra energía consciente para sobrevivir. Sin nuestra cooperación, sin un abastecimiento psíquico de complicidad, ellos simplemente mueren por inanición. Su verdadero poder depende de nuestro deseo de ser gobernados. Un síntoma típico de la enfermedad de la humanidad de hoy es la continua negación de nuestra enfermedad.

REPRESIÓN

Consistentemente reprimimos esas cualidades que elegimos no aceptar de nosotros mismos. Por esa razón es tan difícil distinguir entre la falsedad de nuestro ego, sus múltiples manifestaciones y lo que realmente somos.

“Una nación puede sobrevivir a sus idiotas e incluso sus ambiciosos, pero no puede sobrevivir a la traición desde adentro”. Marcus Tullius Cícero

Esta es la mismísima naturaleza de nuestro falso ser, el ego. Él actúa, como una cortina de humo, para distraernos de la libertad que realmente poseemos. Para que este parásito psíquico pueda sobrevivir, él simplemente nos provee con una sustancia que hace que seamos dependientes de él. En este caso, la sustancia es nuestra energía consciente. Y para que podamos alimentar a este parásito, la sustancia psíquica del "MIEDO" hace que la "humanidad pida" ser "protegida y defendida".
Las funciones de supervivencia de un organismo pueden ser clasificadas en dos básicas:  
Tiene que ser capaz, de crecer, mantenerse y tomar control de su biología, pero también tiene que ser capaz de auto-defenderse. De manera que, si está en crecimiento pero no puede protegerse, simplemente se es  “comida” para otro organismo más fuerte.
Entonces, la supervivencia implica un balance entre el crecimiento y la protección.

A través de la historia de la civilización y la evolución humana,  reconocemos que nuestra naturaleza es permanecer en crecimiento. Y nuestro sistema de protección supuestamente sólo debe ser usado cuando necesitamos ayuda en un momento en el que estamos siendo amenazados. No se puede estar defendiéndose y creciendo al mismo tiempo. Cuando vemos que necesitamos protección, las hormonas del estrés en el cuerpo disminuyen el flujo de sangre en nuestras vísceras (la parte del cuerpo que controla el crecimiento). La cuestión es que si se toma la sangre de las vísceras y se lleva hacia los brazos, entonces no hay sangre en ellas, y eso significa que no habrá crecimiento, pero que se está listo para luchar. Cuando la lucha termina la sangre retorna a las vísceras para crecer de nuevo.
Pero en el mundo actual hay miedo las 24 horas, los 7 días de la semana.
Tenemos una continua fuga de la hormona del estrés en el cuerpo. Simplemente está abierta todo el tiempo. Estamos siempre listos o para correr o para pelear, en cualquier momento, estamos en guardia porque tenemos miedo.

El problema es. ¿Qué implica esto respecto de nuestro nivel de energía? 
Estamos gastando casi toda nuestra energía en protegernos. No se puede sobrevivir si se está en el modo de protección todo el tiempo. Y si el parásito puede controlar la naturaleza del miedo, entonces puede crear el tipo de miedo del cual solo él puede protegernos.

El Reichsfuhrer del partido Nazi, Hermann Goring se sumó a este juego de la oferta y la demanda, perfectamente cuando dijo:
"Los pueblos pueden siempre ser sometidos a la voluntad de sus líderes, eso es fácil. Todo lo que hay que hacer es decirles que están siendo atacados, denunciando a los pacifistas por su falta de patriotismo y de exponer el país al peligro. Funciona igual, sin importar el país que sea".

Esto también aplica a cada psique individual, sólo hay que recordar que el falso ser (ego) tiene un solo deseo: Él quiere convertirse en un ser más grandioso y poderoso que el verdadero Ser. Esta enfermedad hace que creamos que estamos separados de la naturaleza.

Por esta razón vemos un aumento en la dependencia de la tecnología. Por esa razón vemos tan poca responsabilidad. Por eso es que experimentamos tanta intolerancia, Racismo, Sexismo, Especismo y todas las demás formas de discriminación posibles, las cuales llevan al crimen, la violencia, las guerras, y eventualmente la destrucción total del organismo.

Este estado de miedo sin fin, de confusión y segregación en el que parece sumido nuestro mundo, no es más que un síntoma de la raíz del falso ser, o ego, que crea una falsa amenaza.
Si la gente basa su identidad desde una autoridad exterior,  la libertad provoca ansiedad, entonces quienes la sienten, tienen que adoptar el estado de víctima para justificar su violencia en contra de los demás.

SINTOMAS

Los síntomas de nuestra enfermedad "Psico-Espiritual" son las guerras, los ataques terroristas, los desastres artificiales y las figuras que nos lideran. 
Mientras la gente siga enfrascada en sus impulsos privados y su naturaleza egoísta, siempre fallarán al reconocer la razón por la cual estos eventos se manifiestan, y por qué siempre  hay un tipo de personas que logran acceder a tan poderosos cargos. 
La razón por la que hemos fallado por tantos milenios para conquistar estas figuras y líderes arquetípicos es porque por miles de años hemos estado luchando contra los síntomas de la enfermedad y no contra la causa de raíz.

Por cada gobierno corrupto que cae en manos de pueblos revolucionados y oprimidos,  dos más tomarán poder en su lugar cada vez, porque la causa raíz de un gobierno corrupto no yace en el individuo que lo gobierna sino que yace en la psique de cada individuo. Porque un anfitrión inconsciente de un parásito mortal hará lo que pueda para no aceptar que no posee su propia libertad. La gente hará lo que sea, sin importar cuán absurdo sea,  para no enfrentarse a su propia alma.
Estamos tan privados de sensatez en este mundo, que aquellos que simplemente dejan de proyectar sus fallos en los demás y que comienzan a luchar contra sus propios demonios son catalogados como "neuróticos".

Un artículo escrito en los 50's del siglo pasado declara que algunas investigaciones muestran que los individuos que habían sido alejados de los ambientes sociales y culturales se convertían en neuróticos. Esto muestra que cuando esos individuos no tenían persona u objeto en el cual reflejar sus emociones negativas, comenzaron a ver esas cosas en ellos mismos  que rechazaban reconocer antes, y sobre las cuales no sabían ni su naturaleza y mucho menos cómo tratarlas.

Enfrentarse al verdadero "Ser Interior" es algo virtualmente desconocido para el mundo de hoy. Por esta razón, no importa cuántas civilizaciones emerjan y caigan, lo que crea nuestras instituciones es la consciencia colectiva (subconsciente) y no las personas individuales.

La definición de "Locura" es hacer lo mismo una y otra vez “esperando resultados diferentes".  Albert Einstein

Después de muchos intentos se podría pensar que la gente se daría cuenta que la represalia física no puede ser la solución.  Pero aún así aquí estamos, miles de años después, con tecnología que puede clonar el ADN, vehículos que pueden romper la barrera del sonido, sondas que exploran el espacio exterior y una ciencia que puede solucionar casi cualquier enfermedad física, pero aún fallamos al no darnos cuenta de la importancia de nuestros pensamientos y consciencia.

Esta es una descripción clara de la palabra "Locura", y cada uno de nosotros somos responsables de esta epidemia psíquica, porque estamos matando al mensajero y no estamos prestando atención al mensaje.